El 2 de enero pasado se publicó revista Advances in Nutrition de la American Society for Nutrition, un trabajo que examina la relación entre el consumo de ciruelas y la salud de los huesos, el envejecimiento en general, la inflamación y la salud de la flora bacteriana intestinal.
Dos ensayos clínicos investigaron el impacto del consumo de ciruelas deshidratadas (50 a 100 g/día durante 6 a 12 meses) en la salud ósea de mujeres posmenopáusicas y demostraron efectos prometedores en la densidad mineral ósea y los biomarcadores óseos.
La creciente evidencia de otros diez estudios sugiere que además de los efectos estabilizantes o incrementadores de la masa ósea, las ciruelas pasas ejercen efectos antiinflamatorios y antioxidantes.
Y ahora te digo, ciruelas pasas de producción española las tenemos cada día al alcance de nuestra mano.
Un saludo y buen fin de semana